La negligencia médica es una situación devastadora que afecta no solo la salud del paciente, sino también su bienestar emocional, financiero y familiar. En España, cuando un profesional de la salud no actúa con la diligencia esperada y causa un daño al paciente, el afectado tiene derecho a reclamar legalmente.
Las consecuencias de una negligencia médica son complejas y abarcan tanto el ámbito sanitario como el jurídico, por lo que es fundamental conocer cuáles son los derechos de los pacientes y cómo actuar ante una situación de este tipo.
¿A qué nos referimos con “negligencia médica”?
La negligencia médica se define como la falta de atención, diligencia o competencia por parte de un profesional de la salud en la atención a un paciente, resultando en daño. Puede ser producto de un error diagnóstico, un tratamiento incorrecto, una intervención quirúrgica mal ejecutada, o la omisión de información relevante para el paciente. Para que una situación se considere negligencia médica, se deben cumplir tres requisitos:
- Existencia de una relación médico-paciente, donde el médico tiene el deber legal de actuar con cuidado.
- Inadecuada actuación del médico que se desvía de los estándares aceptados en la profesión.
- Daño al paciente como consecuencia directa de la actuación negligente.
Es importante distinguir entre errores médicos que son inevitables y aquellos que ocurren por una mala praxis. No todas las complicaciones médicas derivan en una negligencia: para que esta exista, debe haberse actuado de forma negligente o contraria a los estándares médicos.
Consecuencias legales de una negligencia médica
Cuando se confirma que ha habido negligencia médica, las consecuencias legales pueden variar dependiendo del tipo de daño sufrido por el paciente, la gravedad del caso y el contexto en el que se produjo el error. Las principales consecuencias incluyen:
- Indemnización económica: La compensación por los daños sufridos es una de las principales consecuencias de una reclamación por negligencia médica. El objetivo de una indemnización por negligencia médica es cubrir los costos de tratamientos adicionales necesarios, las terapias rehabilitadoras, las pérdidas económicas sufridas por el paciente (como la pérdida de empleo) y el daño moral. La cuantía dependerá de la gravedad de las lesiones y de su impacto en la vida del paciente.
- Revisión de la licencia médica del profesional: En casos de negligencia grave, el médico responsable puede enfrentarse a sanciones disciplinarias, que pueden incluir la suspensión temporal o la retirada definitiva de su licencia para ejercer.
- Repercusiones en el hospital o centro de salud: En muchas ocasiones, las demandas por negligencia médica también pueden afectar al hospital o la clínica donde se produjo el error, si se demuestra que existían fallos estructurales o una falta de control y supervisión adecuada.
- Consecuencias penales: En casos extremadamente graves, donde la negligencia médica ha causado la muerte o un daño irreversible, se puede iniciar un proceso penal contra el médico o el centro sanitario. Las condenas penales pueden incluir penas de cárcel, aunque estos casos suelen ser menos frecuentes y es necesario demostrar que hubo una conducta particularmente negligente o temeraria.
Pasos para reclamar ante una negligencia médica
Enfrentarse a las consecuencias de una negligencia médica puede ser abrumador. Es por ello que el proceso de reclamación debe llevarse a cabo de manera meticulosa y con la ayuda de un despacho de abogados especialistas en negligencias médicas.
Los pasos básicos incluyen:
- Recoger toda la documentación médica: El historial clínico, los informes médicos, los resultados de las pruebas y cualquier otro documento que pueda acreditar el tratamiento recibido son esenciales para iniciar una reclamación. Es importante solicitar estos documentos lo antes posible, pues los plazos para reclamar son bastante reducidos.
- Obtener un informe pericial: El informe de un perito médico es una de las piezas clave en una reclamación por negligencia médica. Este profesional analizará el caso y determinará si estamos ante una mala praxis médica. Su testimonio será fundamental en un juicio.
- Presentar una reclamación extrajudicial: En muchos casos, la vía amistosa puede resolver el conflicto sin necesidad de ir a juicio. Se puede presentar una reclamación a la compañía aseguradora del médico o del hospital.
- Iniciar una demanda judicial: Si no se llega a un acuerdo, el siguiente paso es iniciar una demanda ante los tribunales, donde se buscará una compensación económica adecuada por los daños sufridos.
La negligencia médica tiene graves repercusiones tanto en la vida del paciente como en el ámbito jurídico. Los afectados deben ser conscientes de sus derechos y de las vías legales disponibles para reclamar compensación por el daño sufrido.
Contar con el asesoramiento de un equipo de abogados especializados en Derecho Sanitario es fundamental para navegar por este proceso, ya que las pruebas periciales y la comprensión del ámbito médico son esenciales para demostrar que hubo negligencia y buscar justicia.
