La epidural es una anestesia que suele aplicarse a las mujeres durante el parto, con el objetivo de reducir el dolor que pueden llegar a experimentar. El dolor del parto es ocasionado por las contracciones de los músculos y la presión sobre el cuello uterino. Este dolor se puede comparar a un cólico intenso en el abdomen, las ingles y la espalda, y también como una sensación de malestar general. Además, algunas mujeres también experimentan dolor en los costados o en los muslos.
En general, la aplicación de la epidural es un procedimiento sencillo para los médicos que asisten a un nacimiento, pero evidentemente no faltan casos de mala praxis; por ello es importante hacer algunas aclaraciones al respecto que podrían serte de gran utilidad.
En Hidalgo Fernández Abogados estamos acostumbrados a tratar con víctimas directas o familiares de víctimas de negligencias médicas en el parto, siendo la aplicación de la epidural una de las causas más frecuentes.
Casos más probables de una incorrecta aplicación de la epidural en el parto
Estadísticamente, hay algunos errores médicos que potencialmente dan lugar a negligencias médicas; podemos destacar los siguientes:
- Epidural administrada en el lugar equivocado;
- Alergia al medicamento que se aplica en la anestesia peridural;
- Dosis de epidural superior a la recomendable según las características de la paciente.
Éstos son únicamente tres de los ejemplos de una epidural mal aplicada, y por ello es indispensable consultar a un abogado experto en negligencias médicas si detectas alguna anomalía durante el parto, como un dolor exagerado o cierta incapacidad profesional para administrar la epidural.
Consecuencias de esta negligencia médica
De producirse una negligencia en el parto y en torno a la epidural, podrían provocarse lesiones internas, nerviosas o medulares. Consecuencia de ello, aparecerán síntomas como pérdida de fuerza, pérdida de sensibilidad, incontinencia o, peor aún, paraplejia.
Queda claro entonces que una mala praxis no puede tomarse a la ligera, y mucho menos en situaciones tan complejas como éstas. Recordemos que, en ocasiones, el parto puede ser urgente, y eso obliga a los médicos a tener que actuar sin tanto margen de tiempo.
¿Es posible reclamar una indemnización por una negligencia médica durante el parto?
Esto es básicamente lo que quieren averiguar quienes nos visitan, y la contestación inmediata es que una actuación negligente por epidural mal dada no sólo puede reclamarse, sino que debe reclamarse, para conseguir una indemnización por negligencia médica para la mujer o sus familiares por los perjuicios generados.
Para dirimir la responsabilidad del médico hay que actuar cuanto antes, cuando las pruebas de su equivocación son aún notables. Pasadas semanas o meses puede ser mucho más difícil obtener una justa compensación, y por eso es conveniente evitar la demora.
En cuanto a los factores que influyen en la cantidad compensatoria que recibe como indemnización tanto la víctima como sus familiares, deben evaluarse el coste de los tratamientos de fisioterapia y rehabilitación, las obras de adaptación en el domicilio, el gasto de compra o alquiler de silla de ruedas u otros implementos; y cualquier otro parámetro que la Justicia entienda que debe ser atendido en dicha reclamación.