El consentimiento informado es documento obligatorio que tiene que presentarse al paciente antes de cualquier operación.
En el consentimiento informada se explicará:
- El objetivo de la intervención;
- Las técnicas a seguir:
- Beneficios y riesgos;
- Posibles alternativas al tratamiento recomendado.
Este documento tiene que entregarse al paciente con tiempo suficiente, para que pueda consultarlo y tomar una decisión.
La ausencia del consentimiento informado, así como la falta de información completa, puede dar lugar a una negligencia médica.
Por otra lado, el paciente debe estar en pleno uso de sus facultades para poder tomar una decisión basándose en la información aportada por el consentimiento informado; de no ser así, serán los familiares o personas más cercanas los encargado de decidir sobre como proceder.
Según el artículo 2 de la Ley 41/2002, de 14 de noviembre, básica reguladora de la autonomía del paciente y de derechos y obligaciones en materia de información y documentación clínica:
1. La dignidad de la persona humana, el respeto a la autonomía de su voluntad y a su intimidad orientarán toda la actividad encaminada a obtener, utilizar, archivar, custodiar y transmitir la información y la documentación clínica.
2. Toda actuación en el ámbito de la sanidad requiere, con carácter general, el previo consentimiento de los pacientes o usuarios. El consentimiento, que debe obtenerse después de que el paciente reciba una información adecuada, se hará por escrito en los supuestos previstos en la Ley.
El paciente podrá decidir libremente (después de haber revisado la información), qué opción clínica elegir e, incluso, negarse a recibir el tratamiento (excepto en los casos extraordinarios mencionados en dicha Ley).
Además el paciente tendrá que proporcionar datos sobre su estado de salud (incluyendo alergias, patologías, etc.) y demostrarse disponible a colaborar a la hora de realizar pruebas y obtener resultados adicionales.
Características del consentimiento informado
Para que quede claro, el consentimiento informado tiene que contar con las siguientes características:
- La información tiene que ser completa: es decir, tiene que detallar los siguientes elementos: técnicas empleadas; beneficios, riesgos y alternativas al tratamiento indicado.
- Tiene que ser comprensible: es fundamental que el paciente entienda lo expuesto en el consentimiento informado.
- Es voluntario: El paciente tiene todo el derecho a decidir libremente si seguir adelante con el tratamiento o no.
Si cree haber sufrido una negligencia médica relacionada con el consentimiento informado, desde Hidalgo Fernández Abogados podemos ayudarle a reclamar y a obtener la indemnización que le corresponde.